Con una parada en el Museo de Memoria de Algeciras, en el nororiente del Huila, comenzó la Caravana Memorias del Sur, un recorrido que busca visibilizar la fuerza de las comunidades que han resistido al conflicto armado y que hoy trabajan en la construcción de paz.

El evento, organizado por el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH), se desarrollará del 22 al 26 de septiembre y abarcará diez municipios de Huila y Caquetá. La iniciativa reúne a lideresas y líderes sociales de diferentes regiones del país —entre ellos Bolívar, Valle del Cauca, Norte de Santander, Chocó, Caquetá, Putumayo, Sucre, Quindío, Antioquia y Huila—, quienes comparten procesos de memoria y reconciliación.
“Esta caravana invita al diálogo, al encuentro y a escuchar la diversidad de voces que desde las regiones construyen paz”, afirmó Alberto Santos, coordinador del recorrido.
El Museo de Memoria de Algeciras, fruto del trabajo conjunto de víctimas y liderazgos locales, fue la primera estación de la caravana. Allí, los visitantes conocieron los relatos del dolor que dejó la violencia, pero también las expresiones de esperanza, como lienzos pintados con palomas blancas y manos entrelazadas que simbolizan reconciliación.
“Traemos café y cacao como un mensaje de que Algeciras resiste e insiste en vivir mejor y en paz”, señaló Marinella Prada Cortés, lideresa de víctimas.
La jornada incluyó también un recorrido por la Casa Yunda, construcción centenaria que ha sobrevivido a ataques armados y transformaciones del municipio. “Estos muros de bahareque son símbolos de la resistencia de Algeciras”, resaltó su anfitriona, Martha Yunda.

Tras su paso por Algeciras, la caravana continuará hacia Caquetá, con paradas en El Doncello, El Paujil, Morelia, San José del Fragua, Curillo, Solita, Albania, Belén de los Andaquíes y Florencia.
El propósito es conectar experiencias de comunidades que, a pesar de haber sufrido los impactos de la guerra, han convertido la memoria en una herramienta de sanación y transformación.
Entre cantos, sonrisas y abrazos, quienes viajan en la caravana expresan que estos encuentros reafirman la posibilidad de una Colombia distinta: una nación que reconoce su pasado y se atreve a soñar con la paz.