En el Huila se adelanta la estrategia “Escuelas Seguras y Protegidas”, un plan que busca prevenir el reclutamiento y la violencia contra niños y adolescentes en zonas donde persisten riesgos por el conflicto y otras problemáticas sociales.
La iniciativa se desarrolla en varias fases. Primero, con espacios de diálogo en los colegios donde estudiantes, padres y docentes expresan cómo conciben una escuela segura. Luego, con encuentros zonales en los que directivos y orientadores escolares identifican rutas de acción. Finalmente, con la participación de los Equipos de Acción Inmediata (EAI), que trabajan en la definición de medidas de prevención fente a posibles casos de reclutamiento o violencia.

En el proceso participan entidades como el ICBF, la Defensoría del Pueblo, la ONU y autoridades locales, además de actores comunitarios como personeros y comisarías de familia.
De acuerdo con los avances, la estrategia no solo apunta a proteger a los menores, sino también a que las escuelas se conviertan en espacios de confianza para la comunidad, donde se fortalezcan las capacidades locales y se reduzcan los riesgos.
El siguiente paso será la formulación de protocolos específicos de prevención, que quedarán integrados en los planes de gestión del riesgo escolar y servirán como guía en situaciones que puedan afectar la seguridad de los estudiantes.