
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, emitió una advertencia pública en la que aseguró que enviará un avión para traer de regreso a su país a venezolanos que, según afirmó, están “secuestrados” en El Salvador. La declaración se dio en el contexto de tensiones diplomáticas entre ambos países y la situación migratoria de ciudadanos venezolanos en la región.
Maduro afirmó que su gobierno está tomando medidas para proteger a los venezolanos que se encuentran en El Salvador y que, según él, han sido víctimas de detenciones arbitrarias o condiciones irregulares. El mandatario aseguró que enviará una aeronave para repatriar a estas personas, sin ofrecer detalles específicos sobre el número de afectados o las circunstancias precisas.
Por su parte, autoridades salvadoreñas no han emitido una respuesta oficial inmediata a la advertencia de Maduro. Sin embargo, el gobierno de El Salvador ha mantenido controles migratorios estrictos en los últimos meses, en el marco de su política de seguridad y regulación de flujos migratorios en la región.
La situación ha generado preocupación entre organizaciones internacionales y de derechos humanos, que hacen un llamado a la protección de los derechos de los migrantes y a la resolución pacífica de las diferencias entre ambos gobiernos. La comunidad internacional sigue de cerca el desarrollo de este episodio y sus posibles implicaciones diplomáticas.